Hacer un recap de lo que uno ha hecho con un año de vida es realmente aterrador, te da un no sé que en el medio del pecho y todo.
Como hoy es el último año de mis 36, me dio por hacer algo aterrador así que he aquí la lista de lo que hice con el año 36 de mi vida:
Finalmente me mudé, nos mudamos… aunque aún falta mucho por hacer ya comienza a parecer hogar, hasta un canario tenemos.
Aunque no cambié de trabajo me siento como si hubiese comenzando un trabajo nuevo porque ahora no somos BP sino TNK-BP. Jefes, estilos, culturas y estrategias nuevas. Too soon to make any conclusions. Ya nos estamos acoplando, ya estamos comenzando a hablar el mismo lenguaje. Dije unos adioses que me pusieron muy triste. Decidí entregarme a esta aventura y no me puedo quejar.
Decidí casarme por segunda vez. 10 años después de la primera decidí apostarle nuevamente al matrimonio pero esta vez con los pies bien puestos sobre la tierra, sin ideas romántica e irreales de lo que es el matrimonio, sin esperar cambiar a nadie, ni siquiera a mi misma.
Decidí que si Dios lo quiere, quiero ser mamá por segunda vez.
Logré dejar de preocuparme (tanto) por lo que come JG. Luego de 4 años de sufrimiento, es un niño en percentil 75, con una pancita gordita y todo.
Decidí que tendremos un perrito. Siempre me negué rotundamente, pero luego de haber vivido con dos cuando estaba en casa de mi mamá tuve que aceptar que los perritos le dan alegría a la vida y son unos seres extraordinarios. JG cumple años en octubre y ese será su regalo.
Engordé full porque no hice dieta ni un solo día de este año. Comí lo que me dio la gana sin ningún remordimiento.
Comencé a caminar por lo menos 4 cuadras al día desde hace dos semanas. Poquitísimo lo sé, pero ese poquitísimo es mejor que el nadísimo al que venía acostumbrada.
Hace dos semanas también, comenzamos a cenar sopa y ensalada aunque sea una vez a la semana. Poco a poco quiero ir agregando pequeños cambios que sé tendrán un impacto positivo en nuestra alimentación.
Ayudé cada vez que pude, me moví para recoger plata y cosas para chamos en situación de abandono. Lo digo no porque quiero vanagloriarme sino porque muchos de ustedes ayudaron y eso lo agradezco. Lo digo porque quiero motivarlos a que lo hagan ustedes también!
Casi todas las anteriores son las principales cosas que hice en mi año 36 de vida.
Que hicieron los 36 conmigo? Fueron buenos en gran parte, no reconocer esas bondades me convertiría en ingrata. Pero les confieso que no los recordaré con cariño. Se llevaron a mis dos abuelas maternas y me dejaron abuela-less. Sensación bastante desagradable porque además te pone en evidencia que la línea generacional inmediata es la de tus padres y tus tíos.
Ahora, la última de esas muertes me marcó como siempre supe que lo haría. Mi Mamma se murió, su cuerpo se cansó y su alma también. Mi Mamma se murió y yo estuve allí acompañándola. Su alma me dijo días antes de morir que yo ya la había tenido suficiente. Son 36 años suficientes? Si veo alrededor creo que sí, muchos amigos perdieron a sus abuelos cuando eran muy chamos. Mi Mamma no solo me disfrutó a mi, sino que disfrutó a mi Chino, fue un disfrute mutuo en realidad. Pero si pienso en el dolor de no tenerla, en la ganas de tocarla, en la imperiosa necesidad de ir cada fin de semana al cementerio a dejarle flores, creo que 36 años no fueron suficientes. Perderla justo en el año 36 que trajo tantos cambios no puede ser coincidencia. Hay algo, algo que no tengo claro, pero algo.
Si tuviese que escoger un calificativo para el año 36 sería INTENSO. Intenso como el amor, como los cambios, como el duelo y como la esperanza del porvenir.